(Balnerario Rudas, Budapest)
La foto, como es de comprender, no la pude hacer en persona (estaba prohibido entrar con cámara). La vez anterior que estuve en Budapest no fui a este balneario (estaba en reforma) y la verdad es que merece la pena. Construido en 1550, fue ampliado en 1566 por el pachá otomano Mustafá Sokoli. En 1952 fue ampliado con una piscina exterior mixta. Hace poco han abierto con los servicios generales nuevos y la verdad es que está francamente bien.
Y aunque sólo sea por la sensación de ponerse ese mandil infame, que es como un babero de recién nacido que sólo te tapa "lo dealante"...
1 comentario:
Estuve en un baño turco de Estambul y hoy me acuerdo de tu experiencia húngara -aunque a mí ni siquiera me dieron mandil: lo enseñé todo-.
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Para celebrarlo inauguro mi museo con dos antiguos ensayemas sobre el agua.
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Un abrazo, y vuelve: necesitamos saber el porcentaje que resta de año.
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